Capitulo III
Sentado en un globo terraqueo de caca.
Beto esta sentado en el piso del balcon de su casa, solo tiene en sus manos un cuaderno viejo con olor a humedad oxidada y una lapicera semi nueva.
En Primera Persona escuchamos el relato que su cabeza elabora para poder escribir lo que le sucedió.
Cómo llegue aca? , cómo borrar de mi cabeza lo que acabo de vivir? siento que mis tripas crujen, las siento resecas, sucias, resistiendo una catarata de mierda que meto a diario en mi boca.
Me voy a obligar a escribir esta experiencia de vida que creo va a ser una inyeccion puesta en el ojo.
La ultima vez que estuve despierto y en mi antiguo trabajo me acuerdo que tomaba, vomitaba y la gente me daba plata por hacerlo. Un día paró un Mercedez 84 muy pulido, en ese auto iban un patovica que siempre daba la sensacion de estar sudado, emanaba un olor a jabón blanco que me hacia acordar a mi abuela, en el asiento de atrás un viejo canoso que me dijo "che Beto subi que te quiero hablar", su aspecto era de los mas raro, tenia un traje de gamuza negro que hacía sospechar a cualquiera, unas botas de cuero con evilla dorada y un cinto que tenia una calavera de plata sobre su pelvis. Le pregunte " me vas a dar unos dolares demas" a lo que me respondio "si te lo queres ganar estan al alcance de la mano", yo no entendia bien a donde apuntaba, ya me había bajado un par de cartones y tenía perdido el juicio.
Juicio Perdido.
El viejo degenerado se agarro la evilla del cinto y me dijo " por unos cuantos verdes rompeme el culo", yo lo mire fijo tratando de entender lo que me pedía pero mis neuronas se negaban a entender. Se bajo los pantalones y apoyado en el asiento del auto me dijo "lameme y rompeme el culo" fueron dos minutos en los que se me paro la verga como un obelisco, me paré y sin mediar pensamiento alguno le clave la cabeza de mi gigante verga en su culo, el viejo degenerado mordia la almohadilla cabecera del asiento de atraz, yo sentía en mi verga que le estaba haciendo daño asique opte por sacarla, el patovica chofer me dio un puñado de verdes y me bajo del auto de un rebolcon. Mientras el auto se alejaba de mí me quedó grabada la imagen del viejo canoso mordiendo el asiento y apretando mi verga con su culo casi al limite de la sutura.
Tirado aca en mi casa me pregunto cual es mi límite con tal de tener alcohol y que nadie me rompa los huevos, me miro la verga y veo mi pantalón verdoso manchado de rojo humedo. se me viene a la cabeza la imagen del viejo mordiendo la almohadilla, me levanto el pantalón para pispear cual es el problema y me veo mi gigante verga teñida de rojo coagulado, un montón de venas que parecen explotadas...
Beto ve esa imagen e instantáneamente su cabeza pega contra una reja del balcón, shock fulminante.
psssssss
psssssss
Continuara...
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